lunes, 23 de enero de 2017

JUAN RAMÓN JIMÉNEZ



La importancia que le damos a un autor depende de varios factores: la calidad de su obra, la renovación de la literatura del momento o el magisterio que ejerció sobre otros. En el caso de Juan Ramón Jiménez, podemos destacar los tres. 

Ligado por edad a la generación del 14, influyó en los autores del 27 en su primera etapa. Y aunque  dijo que dirigía su poesía "a la minoría, siempre", todos podemos acercarnos a ella. Sea en forma de prosa con Platero y yo o en verso, su sensibilidad se vuelca en una palabra siempre poética. Sigamos aquí, de manera resumida, su trayectoria: 

Juan Ramón Jiménez, uno de los mayores poetas españoles del siglo XX, nació en Moguer (Huelva) a finales del siglo XIX y pasó sus años escolares en El Puerto de Sta. Mª, localidad natal de Alberti. La temprana muerte de su padre le marcó de tal modo que desde entonces sufrió crisis nerviosas que le llevaron a sucesivos internamientos en clínicas. Vivió en Madrid hasta la guerra civil, momento en que  comenzó su exilio en Estados Unidos, Cuba y Puerto Rico, donde murió poco después de que le concedieran el Premio Nobel de Literatura.

Conocido por su temperamento melancólico y por su exacerbado perfeccionismo, su trayectoria poética recorre varias décadas que le conducen del modernismo inicial a la poesía total a través de un proceso de depuración, con temas constantes como el sueño, las visiones, la soledad, la naturaleza (agua, mar) o la muerte.

Aunque su obra del exilio está aún por estudiar en su totalidad, su poesía suele dividirse en tres etapas:

-          Etapa sensitiva: libros ligados al modernismo intimista en Ninfeas Almas de violeta, ambos publicados en 1900, en metros tradicionales. Arias tristes y Jardines lejanos propician un primer reconocimiento como voz poética propia, en poemas breves llenos de visiones y sentimiento. En La soledad sonora destaca la adjetivación y el empleo de sinestesias.       

A esta etapa pertenece también Platero y yo, conjunto de impresiones de su tierra onubense en prosa poética, con una carga lírica y de crítica social que reflejan su gran sensibilidad. Aunque se consideró un libro para niños, por el protagonismo del burro Platero, nada más lejos de la intención de su autor.

-         Etapa intelectual: Estío,  de 1916 inaugura un nuevo camino poético, con poemas breves, condensados, de aparente sencillez, desnudos de adornos.

 Diario de un poeta recién casado, de 1917, es su consagración. Aquí aparecen el verso libre y la prosa, cobran protagonismo el mar y la reflexión sobre el presente, que pretende hacer eterno. De esta fase son, además, los poemarios Eternidades, Piedra y cielo (1919) Poesía y Belleza, libros en los que busca plasmar lo esencial del instante, crear una nueva realidad en el poema. En estos títulos está la aspiración máxima de su quehacer poético: poesía-belleza-eternidad.

-          Etapa suficiente: en el exilio y hasta su fallecimiento en 1958, Juan Ramón combina sus tareas de profesor y conferenciante con las poéticas. Algunos libros de esta época son Animal de fondo o Dios deseado y deseante, en el que se aprecian sus preocupaciones espirituales y estéticas, que se resumen en un ideal de dios cercano a la conciencia de ser, al propio poeta como creador o a la misma poesía.

Algunos sus libros se publicaron en dos momentos, tras la constante revisión a que sometía sus escritos en busca de la perfección, o  bien se quedaron en proyectos. Una curiosidad de su escritura es la utilización de la letra j en palabras en que la grafía g se pronuncia como tal, por ejemplo, “intelijencia”.  

                                                                                                                    Mª Teresa Martín Navarro


En estos enlaces encontrarás más información sobre la vida y la obra del poeta:

JUAN RAMÓN: VIDA Y OBRA DE UN NOBEL


Juan Ramón Jiménez. Cervantes Virtual


No olvidemos tampoco a su mujer, Zenobia Camprubí, traductora de los versos del poeta indio Tagore.

Aquí tienes la página web de la fundación que lleva el nombre de los dos:



ACTIVIDADES
 
1. En este poema, el propio Juan Ramón recorre las primeras etapas de su trayectoria literaria, desde sus inicios de influencia romántica a la liberación del Modernismo con la poesía pura.

a) Di las partes en que se divide el texto, según su contenido.
b) ¿Qué etapas de la trayectoria de Juan Ramón aparecen en él? ¿Cuál no?
c) Estudia su métrica y las figuras retóricas.

 
Vino primero pura,
vestida de inocencia;
y la amé como un niño.

Luego se fue vistiendo
de no sé qué ropajes;
y la fui odiando sin saberlo.  

Llegó a ser una reina
fastuosa de tesoros...
¡Qué iracundia de yel y sin sentido!





2. Identifica a qué época pertenece este poema. Justifica tu respuesta. 
 

Intelijencia

Intelijencia, dame
el nombre esacto de las cosas!
Que mi palabra sea
la cosa misma,
creada por mi alma nuevamente.
Que por mí vayan todos
los que no las conocen, a las cosas;
que por mí vayan todos
los que ya las olvidan, a las cosas;
que por mí vayan todos
los mismos que las aman, a las cosas…
¡Intelijencia, dame
el nombre esacto, y tuyo,
y suyo, y mío, de las cosas!

 

 
Más se fue desnudando
y yo le sonreía.

Se quedó con la túnica
de su inocencia antigua.
Creí de nuevo en ella.

Y se quitó la túnica
y apareció desnuda toda.
¡Oh pasión de mi vida, poesía
desnuda, mía para siempre!


Eternidades
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 
 

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